domingo, 26 de febrero de 2012

La Casa Consitorial


La casa Consistorial.




Conoceremos nuestra historia regional hablaremos de este insigne patrimonio Colonial del Estado y es la segunda casa de Alto que aun se conserva de ese legado patrimonial que tenemos.
Donde actualmente se asienta esta edificación fue destinado originalmente, en su fundación de la Villa de San Carlos, para levantar la primera iglesia del nuevo poblado surgido en 1678.


Dicho templo dedicado a la Inmaculada Concepción, era de 40 varas de largo (34 metros), 14 varas de ancho (12 metros) e igual medida en altura; fue construido de bahareque y palma, bendecido en su primera misa realizada el 1° de diciembre de 1682 por Fray Diego de Marchena. A la derecha del templo se hallaba el camposanto, esta iglesia duró 53 años en pie, hasta 1735, año en que fue devorada por un incendio, lo que obligo a acelerar la edificación de una nueva (igualmente dedicada a la Inmaculada Concepción) en el lugar donde hoy se le conoce (esquina de las calles Silva y Sucre), quedando entonces abandonado el sitio donde estuvo la primera iglesia.


En ese mismo lugar abandonado se inició, el año 1737, la construcción de la iglesia o ermita de Altagracia, por cuenta de la Cofradía de los pardos, la cual hubo de ser paralizada después (cuando sus paredes habían alcanzado 1 mt de alto) por falta de recurso, así lo afirma Torcuato Manzo Núñez en su libro SAN CARLOS DE AUSTRIA (P 52).


Pese a haber un acuerdo suscrito entre el Cabildo sancarleño y el Obispo Martí en 1781, no fue sino hasta septiembre de 1787 cuando se inicio la construcción de la sede del Cabildo o Casa Consistorial, al cual debió concluirse antes de la llegada del nuevo siglo. El Cura Fermín Solano da testimonio escrito del inicio de la construcción de la Sala Capitular o sede del Ayuntamiento.

En enero de 1811, transcurridos ya ocho meses del acto de 19 de abril de 1810, donde tuvo el papel patagónico de mover el dedo índice negativamente tras la figura del Capital Emparam, el canónigo Cortés de Madariaga estuvo de visita en la villa de San Carlos y pronunciando un emotivo discurso dirigido a los cabildantes sancarleños reunidos en dicha sala capitular, e igualmente, desde el balcón de esta edificación. Hizo gala de su convincente oratoria ante la multitud que se congregó en la plaza mayor para oír sus palabras libertarias.


Una vez construida, esta edificación fue destinada a un doble uso (tal como era norma en muchas poblaciones coloniales): Las piezas altas de la esquina sirvieron de sede al Ayuntamiento y se le denomino Sala Consistorial o Sala Capitular (actualmente se conoce como salón de sesiones), y la infraestructura de la parte baja fue usada como Real Cárcel pública. Según la tradición oral de la memoria sancarleña, y reflejada en la edición de un semanario sancarleño del siglo XIX, en ella permaneció recluido a principios del siglo XIX el asturiano José Tomas Boves, antes que este se incorporara a la guerra de independencia en defensa de la bandera realista. En 1837 también estuvo recluido en uno de sus calabozos en Coronel Teodoro Figueredo, y en 1839 el Coronel Fernando Figueredo tuvo como prisión a la Sala Consistorial, durante los meses de julio, julio, agosto y septiembre, motivado a las heridas que le causó al amante de su esposa. (Ello aparece reflejado en documentos que reposan en el archivo del registro Principal de San Carlos).


En época de la guerra de independencia, el muro externo de este inmueble sirvió como paredón de fusilamiento de realista y patriotas, y en el año de 1813 el Libertador usó esta misma edificación, durante los días de su permanencia en la Villa, como sede de su Cuartel General 8segun lo testimonia una placa de mármol colocada en la pared externa el años 1913, en conmemoración del centenario la Campaña Admirable).


Para el año de 1856, aún seguía siendo la cárcel pública de San Carlos. En el año de 1905, fue objeto de refacciones y en 1930, la edificación fue reconstruida, respetando su arquitectura original.


En 1936 y 1939 seguía siendo la cárcel pública. Antes de servir de recinto al Colegio Diocesano Juan Pablo II (actualmente), funciono allí durante mucho tiempo la Circunscripción Militar del Estado Cojedes y previo a ello, también fue sede de la Banda del Estado. En los años de 1962, 1968, 1971, 1973, 1986 y 1988 se hicieron reparaciones diversas a dicho inmueble.


Dicho inmueble conserva su estructura y tipología original, pese a que las piezas altas de la esquina presentan una cornisa en el borde superior ( que oculta el alero o saliente de techo) construida en las primeras décadas del siglo XX, así como también le han colocado algunas paredes de bloque para adecuarla al uso actual, al igual que algunas modificaciones en ventanas y puertas; no obstante, su aparejo constructivo primario, con muros de tapia y rafas, sigue siendo el mismo del siglo XVIII.


Esta información fue compilada del libro MONUMENTOS HISTORICOS DE SAN CARLOS de Argenis Agüero

Samuel...el de Los Malabares.

El hijo de Samuel Elías Sánchez “el morocho” y Doña Carlota.

Miembro de la Red de Historia, Memoria y Patrimonio de Cojedes.




jueves, 23 de febrero de 2012

Casa Natal del Coronel Fernando Figueredo.



La casa de los Figueredo está situada en pleno centro de la ciudad de San Carlos estado Cojedes, en el cruce de las calles Sucre y Figueredo.

Este inmueble es fiel reflejo de la arquitectura colonial venezolana de finales del siglo XVIII. En esta casona vieron la luz del mundo tres próceres de la patria: el Teniente José María Figueredo, el Capitán Faustino Figueredo; y el Coronel Fernando Figueredo; los dos primeros murieron en el campo de batalla, en el fragor de la lucha independentista; mientras que el tercero, insigne hijo de San Carlos, alcanzo los laureles del triunfo en la magna gesta épica venezolana, participando en numerosa batallas, entre ellas: Queseras del medio, Boyacá y Carabobo.

Esta edificación ha sido testigo singular de incontables episodios de nuestra historia. Se le observa altiva, arrogante, impetuosa, sobresaliendo con sus hermosos balcones frente a las angostas calles que la circundan; ello infunde respeto y admiración.

Su origen se remonta a finales del siglo XVIII, se ejecución se ejecutó entre 1780 y 1785, fecha última está en la cual el joven Don Ignacio Figueredo Gegundes contrajo matrimonio con Doña Ana Josefa Mena, estableciendo en ella su hogar. Allí, en la suntuosa alcoba matrimonial, nacieron los sietes hijos de esta adinerada pareja. En 1786 nació la primogénita Josefa Antonia, luego en 1788 vino al mundo el niño que la historia se conoce como el Coronel Fernando Figueredo, a quien el destino le reservo el titulo de prócer de la independencia, siendo considerado uno de los oficiales más leales al libertador. Posteriormente, nacieron los otros cinco, entre ellos Faustino y José María, dos próceres que fueron sacrificados por la guerra; además Agueda, María del Rosario y María del Rosario Socorro.

En el furor de la guerra de independencia, la Ley de Secuestro implementada por los realista alcanzo los bienes de Don Ignacio, y entre ellos a la grande y hermosa casona por tal motivo en 1814 una de sus hermanas solicitó al representante del gobierno español al devolución de las propiedades de Don Ignacio, lo cual fue posteriormente accedido, siendo el inmueble devuelto a su legitimo propietaria.
Ese mismo año la casona había sido profanada por las huestes realistas de Ceballos; hecho que al parecer no puedo soportar la señora Ana Josefa, la muerte la encontró en la misma habitación donde había traído al mundo a su valiosa prole. Transcurrieron los años en medio de la crueldad de la guerra, hasta que llegó 1821, año de la libertad.

La historia oral ha traído hasta el presente, que en la casona, en muchas ocasiones el temible asturiano José Tomas Boves, antes de la guerra independista, cuando este personaje en su condición de comerciante de ganados, venía desde calabozo a realizar transacciones a San Carlos, estableciendo estrechos nexos con Don Ignacio Figueredo, llegando a mantener vínculos sentimentales con su hija María del Rosario.

La casa fue restaurada en su totalidad y se encuentra actualmente en funcionamiento, destacando en su interior la biblioteca histórica.
En la actualidad en la casa Figueredo, funciona la Sociedad Bolivariana de Venezuela Seccional Edo Cojedes, la Escuela de Cuatro y Guitarra Clásica de nombre “Rafael Ortega”, la Biblioteca Rosa Elena de Lerzundy , el salón de investigación que lleva por nombre del Tinaquillero Rafael Fernández Heres, Individuo de Número de la Academia Nacional de la Historia de fecha 14/03/1985, hasta su fallecimiento el 16/12/2010.

Los estudiantes tanto del área primaria, secundaria y universitaria, tienen un sinnúmero de libros de una muy extensa colección, la cual estuvo al frente hasta no hace mucho tiempo el insigne educador Don Pedro Manzanero, con su sapiencia y conocimientos, orientan a los que utilizan dichas sala ahora está al frente el profesor Joel Manzanero, cumpliendo así esa bella labor, junto al personal que elabora brindan un excelente trato a los usuarios.

Es orgullo del Cojedeño que podamos conservar una de las pocas casas de alto que aun se conservan de esa época e imponente con su gallardía, y está diciendo la historia es nuestra cultura.


Samuel Omar Sánchez Terán
Miembro de la Red de Historia, Memoria y Patrimonio de Cojedes.

lunes, 6 de febrero de 2012

La Toma de La Flecheras.

194 años de La Toma de las Flecheras.



Un día como, 6 de febrero de 1818. El Ejercicito Libertador llegó al llamado paso de Diamante, donde el rio Apure tiene aproximadamente 700 metros de ancho. El Libertador Simón Bolívar requiere pasar el rio para que el ejército, compuestos de unos 4.000 hombres entre caballería e infantes, pudiera marchar a Calabozo (Guárico) y sorprender a los realistas.


En Venezuela las diferentes acciones bélicas en la guerra de independencia se pueden clasificar en batallas, batalla naval, combate, combates navales, sitios, y tomas. Denominación esta que no deja de tener importancia en referencia a la Toma de Las Flecheras por su importancia histórica.
El día seis en la madrugada nuevamente se inicio la marcha del ejercicito y a las diez de la mañana se llego al paso del Coplé o del Diamante, en el rio Apure, a 1 km, aproximadamente, al este de los muros de San Fernando donde ondeaba la bandera española, era el único sitio por donde podían pasar los patriotas sin el riesgo de que los alcanzara el fuego de los cañones realista ubicados en San Fernando.


El ejercito quedó detenido, no podía pasar el rio por falta de embarcaciones las cuales se encontraban del otro lado del rio en ese lugar es de 700 metros aproximadamente, con una velocidad en sus aguas de 4 millas por horas (7,4127.Kms por horas) el cual a su vez estaba infestado de caimanes y sus aguas aun estaban un tanto altas.


La toma de las lecheras, épica hazaña de los llaneros de Páez. “¿No hay aquí un guapo que se atreva a tomas a nado esas flecheras?”, pregunto Bolívar. “Si lo hay”, contesto Páez.
Tomó cincuenta hombres de la guardia de su caballearía, entre ellos Aramendi, Genaro Vásquez, Cornelio Muñoz, Pedro Camejo (el negro Primero), Juan Carvajal, Felipe Mauricio Martin, José de la Cruz Paredes, José María Briceño Méndez, Pedro Pérez, Antonio Romero, Juan José Rondón, y otros que se pierden en el anonimato de la historia, todos jinetes en briosos caballos sobre silla fuerte, que quitaban sin desmontarse, junto a sus cinchas y gruperas, al igual que sus calzones; en las bocas las lanza, sus espadas estaban sujetas a la espalda o colgadas al cuello, se lanzaron al rio nadando con un brazo y acariciando con la otra los cuellos de sus caballos a la vista del ejercito.


A una distancia de 400 metros sorprendieron a las embarcaciones españolas, los realistas no salían de su asombro, que no podían imaginar tal situación, reaccionaron efectuando varias descargas de mosqueterías y algunas de cañón sobre las cabezas de los hombres y caballos que remontaban la corriente, sin darle en su humanidad. El pánico el caos se apoderó de los españoles, quienes se arrojaron de los barcos que estaban amarrados al rio para ganar a nado su orilla, abandonando las flecheras y cañoneras al garete.


Los intrépidos llaneros se montaron sobre la grupa de los caballos, impulsándose para abordar las flecheras, guiados por su jefe el León de Payara o el taita Páez. Así se apoderaron de ellas encontrándose solo una mujer que había disparado contra los asaltantes el último cañonazo. Catorces flecheras dos cañoneras y otras embarcaciones menores fueron capturadas. “…Asombrado Bolívar, dijo que si él no hubiera presenciado aquel hecho nadie bahía podido hacérselo creer…”


Esta acción sin igual sorprendió a los realista, neutralizándolos, ya que no utilizaron sus fuerza sutiles que apoyadas por la guarnición de San Fernando ni siquiera hostigaron el paso del ejercito patriota por el Apure. El camino estaba expedito hacia Calabozo con un gran ejército el primero de su índole que se constituía con tal cantidad de efectivos desde 1810, estructurado bajo el mando único de Bolívar que lograrían sorprender a Morillo en Calabozo con su Estado Mayor. Pero no abatirlo por errores tácticos al no sitiar la ciudad como debió ser, permitió que este se escapara con su Estado Mayor y la guerra se prolongara por varios años más.


Ha sido una de las pocas veces en la historia que las embarcaciones han sido tomadas por la caballería.



Samuel Omar Sánchez Terán
Miembro de la Red de Historia, Memoria y Patrimonio de Cojedes.

jueves, 2 de febrero de 2012

La Candelaria

La Virgen de La Candelaria.



Su origen Etimológico.



El nombre de Candelaria, tiene su origen en la fiesta que celebra la iglesia de antaño, el cuadragésimo día del Nacimiento de Jesús (2 de febrero) como cierre del periodo navideño. Con la purificación de la madre y la presentación del hijo en el templo, quedaba cerrada en la ley judaica, el ritual que acompañaba el nacimiento de un niño.


Del verbo latino Candere, que significa brillar por su blancura.


El termino fue introducido por el imperio romano, al cual pertenencia Hispania hoy España, la que nos colonizo durante 300 años, Candelaria viene de ese memento histórico cuando el Niño Jesús o Niño Dios, es presentado ante le templo, ahí hay una presencia de luminosidad.
Según el evangelio, Simeón le dice a María, que ha nacido la luz del mundo, pero que su corazón será traspasado por una espada y da origen al color rojo el cual precede al primer motivo de la vela amarilla de la candelaria.


Su Aparición.


La historia de esta advocación esta unida íntimamente a la historia de las Islas Canarias, es especialmente de la isla Tenerife.


La historia, relatada por fray Alonso de Espinosa en 1594, cuenta que apareció en la desembocadura del barranco de Chimisay, parroquia de Güismar, 95 años antes de la conquista de Tenerife; es decir entre el año 1400 y 1401. Dos pastores iban a encerrar su ganado en las cuevas cuando se dieron cuenta de que en la orilla del barranco, sobre una peña, estaba la imagen de una mujer, le hicieron señas para que se apartara, para poder guardar el ganado, pero sus brazos quedaron paralizados; quisieron herirla con sus cuchillos, pero quedaron heridos ellos mismo. Asustados, huyeron los dos pastores a contar lo sucedido al rey Acaymo, quien decidió que fueran ellos mismos quienes la recogieran para llevarla al palacio, al tocarla, ambos pastores quedaron sanados de sus heridas.


En 1559 el papa Clemente VIII nombra Patrona de Canarias a la Virgen de Candelaria y el 12 de diciembre de 1867, Pio IX la declara Patrona principal del archipiélago Canario. El 13 de octubre de 1889 la imagen es coronada canónicamente por el Obispo de Tenerife, Don Ramón Torrijos como quinta imagen mariana de España.


La fiesta de la Candelaria se llama así porque en ella se bendicen las candelas o velas de color amarilla, solemnemente por el sacerdote, que se van a necesitar durante todo el año, a fin de que nunca falte luz en las casas, tanto física como espiritual, dichas velas también se le conoce como “velas del alma” las cuales según una antigua tradición estas representan las luces que alumbran el camino de la gente al nacer y al morir, otros las utilizan en tormentas o crisis familiares.
Venerada en otros Países.


En Perú, Bolivia, Colombia, Cuba, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Puerto Rico,
En Venezuela, la migración Canaria acaecida en todos los confines venezolanos, desde el último tercio del siglo XVII, en la que considerable número de familias de ese origen se desplazan a esas tierras.


Se le rinde culto, el pueblo fue, amalgamando, creando ese sincretismo religiosos, celebrando a nuestra manera no como lo impone la iglesia católica, ni los cánones papales, sino que se expresan como pueblo, de ahí nacen los velorios de Santos y los velorios de la virgen, entre ellos: la Virgen del Carmen, el Padre Eterno.


La Virgen de la Candelaria, en Bailadores - Mérida, se le rinde tributo es una festividad religiosa muy arraigada en los Andes venezolanos, la danza de los vasallos de La Candelaria, también es conocida con los nombres de “Moros de la Candelaria”, “ Negritos de la Candelaria”, “Danceros de la Candelaria”.


En San Diego estado Carabobo, se le rinde culto, al igual en las ciudades de Turmero y Valle de la Pascua, la Virgen de Candelaria es la Santa Patrona.


En la actualidad la región oriental se convierte en esta fecha en la capital religiosa del estado Anzoátegui, la imagen de La Candelaria, tras ser oficialmente declarada por el Obispo de Barcelona como patrona del estado Anzoátegui el 20 de agosto de 1990.


En Cojedes, se celebra la Virgen de La Candelaria en el municipio Tinaquillo son las fiestas patronales en honor a ella, en el municipio Girardot capital El Baúl, se comenzaron a celebrar desde el año de 1850, es una procesión que se inician en al calle Sucre y retornan por la avenida Bolívar, hasta llegar a la Iglesia de San Miguel Arcángel, donde se celebra el santo rosario y una misa especial en honor a la Santa Patrona.



Samuel…el de Los Malabares.
El hijo de Samuel Elías Sánchez (el morocho) y Doña Carlota.

Samuel Omar Sánchez Terán.

miércoles, 1 de febrero de 2012

195 años del Natalicio del General del Pueblo.
Ezequiel Zamora.



La independencia venezolana fue propulsada por una clase social que defendía con las garras sus privilegios, esa clase, la nobleza terrateniente lucho contra viento marea, por el mantenimiento de su prestigio y poderío, se opuso cada vez que fue preciso, contra todo lo que significase peligro para su estabilidad. Después de la guerra de la independencia creyó logrados sus objetivos, depuesto el poder colonial.


Ezequiel Zamora Correa, nació en Cúa, estado Miranda, el 1 de febrero de 1817, hijo de Alejandro Zamora y de Paula Correa.


Zamora se identifica con los estratos más bajos y reprimidos de la escala social, con el peón del rancho, sojuzgado y embrutecido por el odio hacia el opresor despiadado. El pensamiento democrático e igualitario y el proceder recto y valeroso del gran caudillo federalista hace de él una institución política venezolana porque Zamora, como hombre del pueblo se identifica con él, es hechura de su pueblo que logra convertirse en el exponente de los más elevados sentimientos democráticos y las aspiraciones socioeconómicas de la masa popular venezolana.


Ezequiel Zamora. Se estableció en Villa de Cura, Estado Aragua, donde abrió una tienda de víveres, y pronto amplio el negocio con el comercio ganadero y agrícola, en las poblaciones vecinas de los Estados Guárico y Apure. La lucha por el poder dividió al grupo político dirigente del país, entre el oficialismo, agrupado en torno al general José Antonio Páez, y el liberalismo de Antonio Leocadio Guzmán, que fundo el 1840 el Partido Liberal y su vocero El Venezolano, a través del cual difundía las ideas liberales.


Militar, dirigente popular y primer caudillo del siglo XIX, pertenecientes al extracto de los “blancos de orilla”. Durante su infancia realizo una primaria instrucción, localidad convulsionada por las luchas independentistas, más tarde se traslado a Caracas donde continúo sus estudios en la escuela de Lancaster, su única educación formal.


Siendo miembro del Partido Liberal, se presento a las elecciones de 1846, como candidato a “elector” por el Cantón de Villa de Cura, pero su nominación fue objetada por los conservadores.
El 20 de febrero de 1859 se desató la Guerra Federal, encabezada por Juan Crisóstomo Falcón, Zamora se unió a Falcón como jefe de operaciones de occidente; siendo el brazo ejecutor de la Guerra Federal desarrollo una gran actividad y gracias a su carisma logró organizar un ejercito popular a favor de los Federales.


El 28 de marzo de 1859, tomó San Felipe y ordenó la provincia de Yaracuy como entidad federal, tres meses dedico Zamora a la organización de las tropas para lo que seria la batalla decisiva de Santa Inés, en la cual derroto al ejercito centralista, acción fundamental en el proceso de la Guerra Federal; constituyo un verdadero tratado de estrategia y táctica militar, diseñado por Zamora y ejecutado por 5.000 campesinos y campesinas, que usando una maniobra de falsa retirada, combinada con el recurso de trincheras, emboscada y el incendio de la sabanas, le dio un golpe estratégico a las tropas de la oligarquía.


Ezequiel Zamora, se fue al centro del país a través de Barinas y Portuguesa, pero antes de llegar a Caracas decidió atacar a la ciudad de San Carlos, durante los preparativos para la toma de la plaza, recibió un disparo en la cabeza que le ocasiono la muerte el 10 de enero de 1860. La bala que asesino a Zamora no se supo nunca de donde partió; con ella cambio el rumbo exitoso que llevaba la guerra para os federales y produjo su derrota.


El 24 de abril de 1863, se firma un acuerdo político en la Hacienda de Coche, que puso fin a la guerra.


Zamora, pretendía era la revolución campesina que transformara la estructura de la propiedad y la tenencia de la tierra, es la participación de las clases bajas, una revolución de abajo hacia arriba.


De las bases Ezequiel Zamora, para el gobierno federal instituye la libertad de prensa, la libertad política y social del individuo.


El proyecto de Constitución para el Estado Federal de Barinas dado en mayo de 1859, sintetiza el pensamiento de Zamora, regiría los destinos del Estado hasta que se sancionara la Constitución Federal, luego que todas las Provincias de Venezuela, se convirtiesen en Estado Federales.
Ezequiel Zamora General del Pueblo Soberano.


Samuel Omar Sánchez Terán.
Miembro de la Red de Historia, Memoria y Patrimonio Histórico de San Carlos.